SIDA
Durante muchísimos años la prioridad ha sido tratar la infección por VIH, de hecho se consideraba que curarlo era una entelequia, porque el virus se introduce en lo más profundo de nuestras células, en el ADN y, una vez lo hace, es muy difícil de poderlo eliminar.
LA CURACIÓN
La curación ya es un hecho, no es escalable a todo el mundo, pero nos ha dado las bases de la biología, porque hemos pasado de ver una enfermedad que sin tratamiento es prácticamente mortal en el 100% de los casos, a obtener tratamientos y tener pruebas de curación.
ÚLTIMO DESCUBRIMIENTO
Pacientes que padecían, además de SIDA, una leucemia que requería de un trasplante de médula, una intervención arriesgada que solo está indicada en cánceres hematológicos, se les sometió a un trasplante de células madre resistentes al VIH procedentes de sangre de cordón umbilical y no de un donante adulto compatible solamente. Estas células madre almacenadas para intentar curar simultáneamente el cáncer y el VIH, se infundieron con células madre de uno de los familiares de pacientes, para aumentar las probabilidades de éxito del procedimiento.
Con la sangre del cordón umbilical no se dispone de tantas células y tardan un poco más en poblar el organismo tras el trasplante, pero usar una mezcla de células madre de un pariente y de sangre de cordón umbilical ayuda positivamente a las células de la sangre de cordón umbilical.